Según reconstruyó la fiscal Noelia Riccardi, de la Unidad Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual, la víctima caminaba por la banquina de la ruta A012 cuando fue interceptada por un móvil policial en el que se trasladaban los agentes Ricardo P. y Lautaro A. Luego de identificarla, le ofrecieron llevarla a su domicilio.

La joven subió al patrullero, pero a pocos metros los efectivos detuvieron el vehículo y apagaron las luces. En ese momento, el agente Lautaro A. pasó al asiento trasero y, siempre según la acusación, abusó sexualmente de la adolescente mediante el uso de la fuerza. Durante el ataque, un llamado radial interrumpió la situación y el móvil continuó hasta la vivienda de la víctima, donde los acusados la dejaron tras amenazarla para que no hablara.

Por todo esto, la fiscalía acusó a Lautaro A., de 26 años como responsable por los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado por ser cometido por dos o más personas y por haber sido cometido por personal perteneciente a las fuerzas policiales en ocasión de sus funciones en calidad de autor. En tanto que Ricardo P. de 27 años fue imputado por los mismos delitos pero en calidad de participe primario.

Para ambos agentes la fiscal Riccardi anticipó que solicitará una pena de 12 años de prisión efectiva.